¿SE NACE CRIMINAL? LA MENTIRA DE LA GENÉTICA DEL CRIMEN Y EL VERDADERO ORIGEN DE LA VIOLENCIA
Autor: Francisco Javier Rivero Sánchez
Afiliación: Experto en Criminología y Psicología Criminal
Fecha: 11 de marzo de 2025
INTRODUCCIÓN: EL ENGAÑO DE LA “GENÉTICA CRIMINAL”
Nos han dicho que algunos nacen con el mal en la sangre.
Que hay personas que están predestinadas a ser criminales por su genética.
Que la violencia, el robo o el asesinato están codificados en su ADN.
Pero aquí está la verdad que nadie quiere admitir:
• No existe un “gen asesino” que determine quién cometerá un crimen (Beaver et al., 2017).
• Los factores sociales, psicológicos y ambientales tienen un peso mucho mayor que la genética (Caspi et al., 2002).
• Culpar a la biología es una excusa para evitar hablar de pobreza, abuso, traumas y desigualdad (Raine, 2013).
Si la genética fuera el único factor…
¿Por qué tantos criminales crecieron en ambientes violentos?
¿Por qué hay personas con antecedentes familiares de delincuencia que nunca delinquen?
📌 Imagina a: Un bebé nace. ¿Está destinado a ser un asesino… o su entorno definirá su camino?
I. LA FALSEDAD DE QUE EL CRIMEN ESTÁ EN EL ADN
Desde el siglo XIX, se ha intentado encontrar la clave del crimen en la biología.
• Cesare Lombroso, el “padre de la criminología”, decía que los criminales podían identificarse por sus rasgos físicos y que el crimen era una herencia biológica (Lombroso, 1876).
• Los estudios eugenésicos del siglo XX promovieron la idea de eliminar a los “genéticamente defectuosos” para reducir la criminalidad (Kevles, 1995).
• En la actualidad, hay quienes intentan revivir estas teorías con estudios de genética criminal (Raine, 2013).
El problema es este:
• No hay un solo estudio que haya demostrado que la genética predice el crimen con precisión (Guo et al., 2008).
• Los estudios que han encontrado ciertos patrones genéticos también reconocen que el entorno es un factor determinante (Moffitt, 2005).
• La mayoría de los asesinos seriales no comparten características biológicas únicas, pero sí infancias marcadas por trauma y abuso (Hickey, 2015).
Si la genética fuera un factor determinante…
¿Cómo explicamos a criminales que vienen de familias sin antecedentes delictivos?
📌 Ahora imagina a: Un investigador examina un genoma. No hay nada que indique que alguien está destinado a matar.
II. LOS VERDADEROS FACTORES QUE CREAN CRIMINALES
Si el crimen no es genético, ¿qué lo causa realmente?
• El entorno familiar: Crecer en un ambiente abusivo o violento es un factor común en muchos criminales (Widom, 1989).
• Las oportunidades económicas: La falta de acceso a educación y empleo es un fuerte predictor de conductas delictivas (Sampson & Laub, 1993).
• Las experiencias de la infancia: El abuso infantil, la negligencia y la falta de vínculos afectivos saludables son claves en la psicología criminal (Felitti et al., 1998).
• El entorno social: Comunidades con altos niveles de crimen generan ciclos de violencia difíciles de romper (Shaw & McKay, 1942).
Ejemplos Reales:
🔴 Charles Manson
• No nació con un “gen criminal”, pero creció en un ambiente de abandono y delincuencia (Guinn, 2013).
• Fue criado en orfanatos abusivos y pasó su juventud en reformatorios.
🔴 Richard Ramirez (El Acosador Nocturno)
• Creció viendo a su primo, un exsoldado, mostrarle fotos de mujeres que había asesinado en Vietnam (Carlo, 1996).
• Fue víctima de violencia familiar desde pequeño.
🔴 Ted Bundy
• Aunque su infancia parecía estable, se descubrió que creció en un hogar donde su abuelo era extremadamente violento (Rule, 1980).
• Sufrió traumas que moldearon su comportamiento.
📌 Imagina a: Un niño es testigo de violencia en su hogar. Su futuro depende de lo que haga la sociedad para protegerlo.
III. CUANDO LA CIENCIA ES MANIPULADA PARA JUSTIFICAR REPRESIÓN
¿Por qué todavía hay quienes insisten en que la genética determina el crimen?
• Porque es una excusa conveniente para no abordar los problemas sociales (Gould, 1981).
• Porque justificaría políticas de vigilancia extrema contra ciertos grupos “de riesgo” (Harcourt, 2007).
• Porque refuerza narrativas racistas y clasistas sobre el crimen (Russell, 1998).
Ejemplo real:
• En 1994, el libro The Bell Curve sugirió que la inteligencia estaba relacionada con la criminalidad y que ciertos grupos étnicos eran más propensos al crimen (Herrnstein & Murray, 1994).
• Muchos gobiernos han intentado aplicar “perfiles genéticos” para predecir delincuencia, lo que ha llevado a abusos contra comunidades vulnerables (Duster, 2003).
📌 Ahora imagina a: Un legislador revisa un informe. Prefiere culpar a la genética antes que invertir en programas sociales.
IV. EL PELIGRO DE CREER QUE EL CRIMEN ES UNA CUESTIÓN GENÉTICA
Si aceptamos la idea de que algunos nacen criminales, abrimos la puerta a peligrosas consecuencias:
• Criminalización de personas basándose en su ADN en lugar de sus acciones (Lynch et al., 2011).
• Leyes más represivas contra ciertos grupos, justificadas por “predisposición genética” (Garland, 2001).
• Desigualdad social disfrazada de ciencia, donde los ricos pueden decir que los pobres “son así por naturaleza” (Zimbardo, 2007).
📌 Imagina a: Un niño es etiquetado como “potencialmente peligroso”. Su vida ya está marcada por un sistema que lo condenó antes de cometer un solo delito.
V. ¿CÓMO PREVENIR EL CRIMEN SIN CULPAR A LA GENÉTICA?
Si queremos reducir el crimen, debemos enfocarnos en lo que realmente importa:
• Invertir en educación y oportunidades para las comunidades vulnerables (Sampson et al., 2002).
• Proteger a los niños de hogares abusivos y brindar apoyo psicológico (Finkelhor, 2008).
• Reformar el sistema de justicia para que se enfoque en prevención y no solo en castigo (Clear, 2009).
• Promover estudios criminológicos que analicen factores sociales, no solo biológicos (Wacquant, 2009).
📌 Ahora imagina a: Un investigador revisa estadísticas de criminalidad. La respuesta nunca estuvo en el ADN, sino en la sociedad.
CONCLUSIÓN: NADIE NACE CRIMINAL, PERO LA SOCIEDAD LOS CREA
Nos gusta pensar que el mal es algo biológico.
Nos gusta creer que la ciencia puede predecir quién será un asesino.
Pero la realidad es esta:
• No hay evidencia de que la genética por sí sola determine el crimen (Moffitt et al., 2011).
• Los verdaderos factores son el abuso, la pobreza, el trauma y la falta de oportunidades (Raine, 2013).
• Culpar al ADN solo sirve para justificar políticas de control y represión (Lynch et al., 2011).
📌 Imagina a: Un criminal no nació para matar. Pero su historia explica por qué lo hizo.
BIBLIOGRAFÍA
• Beaver, K. M., Barnes, J. C., & Boutwell, B. B. (2017). The Nurture Versus Biosocial Debate in Criminology: On the Origins of Criminal Behavior and Criminality. SAGE Publications.
• Carlo, P. (1996). The Night Stalker: The Life and Crimes of Richard Ramirez. Kensington Publishing.
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• Rule, A. (1980). The Stranger Beside Me. W. W. Norton & Company.
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• Widom, C. S. (1989). Does violence beget violence? A critical examination of the literature. Psychological Bulletin, 106(1), 3-28.
• Zimbardo, P. (2007). The Lucifer Effect: Understanding How Good People Turn Evil. Random House.
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